miércoles

Condiciones actuales 2


 33:12 am, CST.


Puesta del sol: Alimentarme de tu carcajada.
Sensación térmica: Congelamiento de ideas sensoriales.
Humedad: Su boca llena de palabras.
Visibilidad: [ –¿Me escucha?
 –Mejor aún. Le leo.
 –Por favor, es importante, escuche: Se sueñan nuestras miradas.] 
Viento: SE cuela por debajo de las faldas.
Punto de rocío: Barco zarpando antes de olvidarles.
Salida del sol: Con sonrisa de verte a la cara.





Buen viaje.






Buen viaje por que los sueños ya no me alcanzan ni con tu sonrisa envinada, ni con tu mirada cantarina.
Buen viaje por que este cuerpo ya no te retiene, ni este texto ni ningún otro; buen viaje por que tu sueño fue como el verdor express en el desierto: en un pestañeo despertamos en soledad.
Empaca en tu maleta las palabras dadas, para correr a guardadlas debajo de la cama donde nadie más las encuentre y llore, por el recuerdo de estar de viaje, cuando ya se está en casa.
Lee la postal que mandaste desde el mar y sonríe por la belleza, que disfruta ese viajante inmemorable, de las cosas que sólo tú sabes de las sombras de la noche; de ese mar de arena ardiente y cielo con diminutas linternas.
La chica triste que te hacia reír te desea un buen viaje; ahora que estás devuelta en casa.




Quiero aclarar que este no es el texto dedicado a Bichito, que se encuentra en recuperación de su rodilla,  por tanto ir de peregrinación a San Juan de los Lagos.

domingo

Algo mortal



Algo mortal hay en nosotros 
que quisiera morir con lo que muere.
 A. Manchado

Vivir, vivir
¿y para qué?
si todo se ha de ir
o ya se fue.
Mallarmé.

¿Para qué dejarnos aquí?
Deseo alcanzar tus pisadas y no se puede,
no me alcanzan los respiros,
no me bastan los dedos de azur 
enredados en tus cabellos.
No me alcanzan tus sueños, tus labios;
el recuerdo ni el aire que respiré.
¿Para qué dejarme así? ¿Para qué?
si todo se ha de ir o ya se fue.

®Elihe y el barco ebrio. 

Escuchando Howl mientras te alejas.